Decisiones Tellistas 20-20.
En el descubrir de la vida, interiorizar la
mirada que El Señor nos dirige y su inmediata exclamación: “y vio Dios que era
muy bueno”, plenifica las tres miradas, que como Tellista tenemos que vivir: la
mirada a Dios, mi propia mirada y la mirada al mundo.
“Descubrí tu Bondad…y vi la dulzura de tus caricias.” le dice la Madre
al Señor.
Encontrar la Bondad de Dios nos envuelve en la dulzura de la vida,
arranca la amargura del corazón y nos encamina al tierno trato que los demás
esperan de nosotros.
Si Dios nos ha tratado con bondad, sería muy bueno
tratarnos de la misma manera, y así, toparnos con el Ser de Dios: “Que Bueno es Dios y me parece haber dicho
todo”
Hoy he decidido ser
bondadoso.
Tellista: atrévete
a ser libre.
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