¡¡¡HEMOS ENCONTRADO UN TESORO REZANDO A LA LUZ DEL SAGRARIO CON MATILDE!!!

“Me gustaría ser un ángel para llevar la paz a tu mundo, para que mis palabras siempre fueran perfectas, para no herirte en tu camino…” (Una ilusión, un sueño, una estrella. Margarita Higuero Ruiz)

Estas  palabras, prestadas, no son de despedida, porque si hemos hecho algo bien, como grupo de oración, esto ha sido confirmar nuestra fe (Poca o mucha, pero la nuestra.) y eso hace que nuestra MISIÓN, como testigos de la Fe, no se interrumpa por un cambio de horario o de dinámica en el trabajo.
Puede que ya no quede por escrito, hasta el próximo curso, pero nosotros, como renglones de Dios que somos, tenemos una historia que vivir para los demás, en todos nuestros ámbitos de actuación (familia, casa, compañeros, colegio, lugar de vacaciones, etc.).No dudo de que sabremos dar testimonio, desde la escucha al otro, con  la cercanía y el cariño por estandartes.
Estoy seguro que Madre Matilde tiene sus ojos clavados en nuestros alumnos, pues son su promesa para Dios, y que sabrá hacer de nosotros un instrumento útil para llevar a cabo esa promesa.

“Animaros unas a otras siempre; de aquí la unión y la fuerza, de aquí la alegría continua para alabar continuamente al Señor.”(MADRE MATILDE)

¡PAZ Y BIEN, GENTILES!

¡AMÉN!