Traigo aquí un ejemplo del carisma del Papa Francisco.
LA IMPORTANCIA DEL EJEMPLO Y LA FORTALEZA DE LOS GESTOS Y LOS SÍMBOLOS.
"En su primera ceremonia de de ordenación sacerdotal en la Basílica de San Pedro, Francisco invitó a diez nuevos presbíteros a dar las gracias "a vuestras madres, abuelas, y catequistas, que os transmitieron el don de la fe". Visiblemente emocionado, les suplicó "en nombre de Cristo y de la Iglesia: por favor no os canséis de ser misericordiosos".Les aconsejó "no tener miedo a la ternura con los ancianos".Eran consejos de su propia experiencia sacerdotal, que resumía en frases breves y claras:"SOIS PASTORES, no funcionarios; SOIS MEDIADORES, no intermediarios."El último fue: "Tened siempre ante los ojos el ejemplo del Buen Pastor, que vino a servir y no a ser servido, y a buscar a aquellos que estaban perdidos".El Papa realizaba de modo vigoroso cada uno de los gestos como la imposición de manos sobre la cabeza de los candidatos o la unción con el óleo. Estaba muy emocionado, casi tanto como los nuevos sacerdotes."
Nosotros, desde el Equipo General de Pastoral, estamos intentando concienciar a los agentes pastorales y a los profesores de nuestros centros de lo importante que es su labor. Son ejemplos vivos del Buen Pastor entre los alumnos y eso los combierte en simiente para el futuro.
Impulsando el conocimiento de la vida consagrada de las HHMMI y de la caridad/gratuidad del servicio a través del voluntariado de los monitores tellistas estamos haciendo IGLESIA, modestamente, al estilo de Madre Matilde.
Por eso, aunque nos quede más lejos que la celebrada en Madrid, la JMJ de Río de Janeiro, nos debe ayudar a enfocar los problemas e inquietudes de nuestros jóvenes desde la Iglesia, mostrando nuestros valores como parte de la respuesta a esas inquietudes.
Anímándoles, acompañándoles y mediando es como nuestras semillas darán fruto.
